Saltar al contenido

Kéfir de agua Pinky – Tónico natural casero con remolacha y jengibre confitado

Como suele ocurrir en los frigoríficos llenos de delicias fermentadas, casi nos olvidamos de esta botella con el dedo meñique. Dos semanas más tarde, por casualidad, nos topamos con él; al principio pensamos en tirarlo. Pero cuando lo abrimos y lo vertimos en un vaso, el kéfir estaba perfectamente burbujeante. Las burbujas eran perfectas y el sabor era ligeramente picante, terroso y agradablemente dulce con un toque especiado.

Source link